viernes, 27 de junio de 2025

 

 Parque La Venta,  apropiación global y apropiación popular.

                                                                       Rodolfo Uribe Iniesta.

                                                                       Coloquio sobre Parque la Venta Ecosur

                                                                                     Unidad Villahermosa. 23 junio de 2025                            

Hay situaciones en donde no existe posibilidad de tener una posición neutral porque se trata de una disyuntiva. En este caso estamos en la decisión de la modificación por un espacio público urbano para darle un sentido global económico excluyente de la vida local o una recuperación y mejora y rehabilitación para mejorar la calidad de vida y ofrecerle una experiencia auténtica a los visitantes como lo propuso en sus compromisos el gobernador de Tabasco. Hace 4 décadas se hablaba de investigación participante cuando se acompañaba una acción colectiva, hace 3 de investigación implicada donde los mismos actores participaban en la definición del objeto de estudio, ahora se habla de sujeto ubicado en tanto lo que se exponen los procesos de diálogo de los diversos actores en la complejidad de las diferentes dimensiones de la situación. La perspectiva de complejidad tiene mucho sentido aquí porque quienes proponen el proyecto de museo sólo ven una sola dimensión: “la conservación de las piezas” y tienen un solo objetivo: “aumentar el turismo”. De acuerdo con Arturo Escobar nos hablan entonces de una perspectiva de pocas relaciones sociales y mucha teleología con poca sustentabilidad, mucho materialismo y utilitarismo y poca sociedad; mientras al abordaje estudiando las diversas dimensiones de la situación nos permiten plantear alternativas vitales desde la población local sin desplazar ni excluir a todos los elementos actuales vivos incluyendo vegetación y animales. En esta metodología la “conservación de las piezas” no se lee o interpreta como una mera cuestión técnica, sino como lo que Bourdieu llama un “enjeu”, un campo, un emplazamiento, un nudo, donde coinciden y se confrontan múltiples actores y dinámicas que han de ser identificadas y explicadas una a una y en sus relaciones, como lo que es: una coyuntura como la define Hugo Zemelman, es decir, algo objetivable como una sola cosa pero en contradicción y lucha: un sistema de conflicto en donde en su desarrollo o proceso ha de primar una decisión u otra.

Construir un nuevo polo de Desarrollo. Un megaproyecto es una infraestructura que implica una inversión a gran escala que implica una inversión significativa de capital y recursos con impactos sociales, económicos y ambientales que genera impactos profundos, desplaza a la población local y la excluye de sus beneficios. Construir el edificio postmoderno del Museo Nacional Olmeca, destruyendo el Centro de Convivencia Infantil, violentando el diseño y contenido monumental, ecológico, artístico y sentimental del Parque la Venta y afectando su estética visual para vender la marca Carlos Pellicer como atractivo, contaminando la Laguna de las Ilusiones, mutilando el principal pulmón y espacio recreativo de la ciudad provocando un conflicto en la principal arteria vial de la ciudad y del estado, no generará más desarrollo local.  Villahermosa ya tiene varias experiencias en ese sentido como las dos últimas reconstrucciones del malecón y el MUSEVI, que sin embargo no destruyeron patrimonio existente como en este caso.

Ni siquiera provocara la estancia de una noche y día más de los turistas. Y sí -como todo megaproyecto gentrificador- expulsará a las familias pobres de su principal centro gratuito y accesible de esparcimiento y recreación familiar, de temperatura templada al aire libre y de convivencia con la naturaleza, obligándolas a refugiarse en  plazas comerciales y romperá el vínculo afectivo, simbólico e identitario que tiene toda la población con la obra del principal personaje del estado. El rumor que están corriendo los empleados públicos de que se trata de una propuesta de Andrés Manuel López Obrador aumentará el rechazo a su persona, al gobernador y a la Cuarta Transformación.

En cambio, construir el edifico del Museo Nacional Olmeca en otra parte de la ciudad o en la olvidada y descuidada Villa la Venta de Huimanguillo, Tabasco, si generará la necesidad del turista de otra pernocta y otro polo de desarrollo en la propia ciudad; o todo un proceso de desarrollo regional en el siempre abandonado extremo poniente del estado. Presentar un render sin un estudio de la pertinencia social, económica, urbana y vial de la localización, y sin un proyecto arquitectónico completo, y éste a su vez sin un proyecto museográfico anterior es un acto de irresponsabilidad. No se puede presentar primero el edificio y al final la museografía. El orden de un proyecto serio es el contrario.

El megaproyecto ha provocado que la población resalté las fallas y carencias del actual gobierno como ocurre en el sector salud. El efecto positivo que ya ha tenido el macroproyecto es el resurgimiento de la actividad de la sociedad civil independiente de gobiernos, partidos y ONGs, informándose, organizándose y movilizándose por un bien común y los sentimientos del pueblo como en los 80 y los 90.  El sentido común pregunta: ¿No saldría más barato construirle casetas a los monumentos que el edificio de Norten con todos sus impactos colaterales?

La Apropiación Global Neoliberal y la Apropiación Popular. La lógica del proyecto cumple con la ley del despojo neoliberal expuesta por Noah Chomsky: el gobierno abandona o descuida una instalación o servicio para justificar su desaparición, venta, privatización o nueva construcción. En la globalización se le reemplaza con algo que no tiene sentido o beneficio para la población local general sino de manera excluyente lo tiene para una población económicamente solvente que genera recursos por su desplazamiento lejano, por su transportación. Se valora la instalación o emplazamiento bajo un criterio funcional único, por ejemplo, argumenta el INAH que el museo no cumple ya su función porque 25 de 50 niños encuestados no responden que es la cultura olmeca ni que animales vieron. El utilitarismo está en que no se valoró la convivencia familiar, con la naturaleza y los animales y no se preguntó si disfrutaron y pasaron un buen tiempo. Es le mentalidad de la fábrica total donde hasta en el tiempo libre se ha de aprender o trabajar, pero no descansar o disfrutar.

              Además se genera una distorsión del tiempo, en este caso, las familias tabasqueñas pasaban mínimo una mañana si no un día entero en el Parque. Los turistas, incluso si se construyera el edificio nuevo junto al parque, sólo pasarían dos horas en el lugar, igual que ocurre en Palenque que es mucho más grande. Se le roba tiempo de vida a la población local y de utilización a la infraestructura. Las parejas ya no podrán besarse de noche frente a la Cabeza Olmeca.

              En los días de calor, los niños de las colonias pobres de la ciudad convierten en balneario la Fuente de los Poetas, y todo el conjunto del parque, incluidos, por supuesto el Centro de Convivencia y Parque Mueso son espacios de libertad, clima soportable y recreación. Un secreto que develó la actual situación era la relación entrañable que todos tenemos con los coatís o antes localmente llamados tejones. El proyecto ha hecho evidente que la relación de la población de toda clase social con el “Tomás”, es afectiva, y el tabasqueño, lo decía ya en su Ensayo Sociológico Manuel R. Mora, es ante todo emocional y emotivo. Golpearlo en lo que quiere, como hace este proyecto, es meterse en problemas.

Los Macroproyectos del Segundo Piso de la Cuarta Transformación. Algo particular está ocurriendo en el segundo sexenio de la Cuarta Transformación. Si durante el primer sexenio de la misma los macroproyectos de la misma tuvieron un sentido de transformación de condiciones nacionales, corrigiendo como con el aeropuerto del valle de México, Completando como el tren Insurgente, respondiendo a una necesidad nacional como la Refinería de Dos Bocas, respondiendo a compromisos internacionales como la planta eléctrica de Huesca, Morelos, y completando antiguos planes  de infraestructura como el Tren Maya y el Tren Interoceánico, han aparecido unos muy diferentes pero con condiciones particulares semejantes entre sí.

              Se trata de macroproyectos definidos como tales por su costo de construcción y el impacto ambiental, urbanístico y social en su entorno que están en zonas urbanas y comparten características de no ser obras consultadas públicamente con anterioridad, cuyos proyectos, manifestaciones ambientales y permisos no se hacen públicos en contradicción evidente con los principios democráticos y las leyes vigentes y de organización territorial, planeación urbana y protección al medio ambiente en los que se había avanzado en el último medio siglo y que había asumido y prometido profundizar la 4T. Uno de ellos es la aceptación de la construcción de una fábrica de cerveza Heineken en Yucatán en donde como en Mexicali el agua natural es escaza sino que además depende de un sistema altamente frágil y ecológicamente único en el mundo. Y las otras 3 destruyen lugares de alta significación simbólica, uso y apropiación popular, y de alta importancia y apreciación identitaria local, además de ser parte del patrimonio cultural y/o ecológico local. Se trata de la construcción del 4º muelle de Cozumel que impedirá y privatizará el acceso libre al mar de la población local, la destrucción de la Ciudad de las Artes para construir un estadio de futbol en Tepic, Nayarit, un proyecto turístico en Todos Santos, Baja California y finalmente, la construcción del Museo Nacional Olmeca sobre el Centro de Convivencia Infantil del Parque Tomás Garrido y el Parque Museo la Venta de Villahermosa, Tabasco. En Monterrey el gobierno estatal había propuesto la construcción de un viaducto elevado sobre el río Santa Catalina que cruza la ciudad, pero ante la resistencia de la sociedad civil, se canceló el proyecto.

              Algo está pasando silenciosamente dentro de la Cuarta Transformación. Es evidente que su segundo piso cambió la relación con los grupos empresariales y sus corporaciones. No que no hubiera una mala relación económica con el anterior gobierno, si verbalmente había desencuentros, a la hora de asignar proyectos a lo que antes llamábamos iniciativa privada salió bastante bien a pesar de que perdieron los contratos que se le asignaron, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos, al ejército, donde siempre el cuerpo de ingenieros se ha encargado de la infraestructura como aeropuertos, presas y hasta carreteras. Todos tenemos en mente el caso del Tren Maya, que siendo un proyecto existente desde los años 90 e incluso apoyado por la UNESCO, fue un compromiso con el sector empresarial del turismo de alta gama de la Península, y que en principio se le comisionó a empresas privadas e incluso nombrando responsables por tramos a empresarios bajo la dirección del promotor empresarial Jiménez Pons. Algo pasó que se desplazó a éste y se nombró a un político seguidor de Andrés Manuel, Javier May, como encargado general y se le comisionó al ejército la construcción y manejo de varios tramos e incluso los hoteles del proyecto.

Hechos en Villahermosa: Lo primero es lo sorpresivo del proyecto: en sus compromisos de gobierno el actual gobernador no hablaba de la construcción de ningún nuevo museo sino por el contrario de rescatar la Laguna de las Ilusiones y rehabilitar los Parques Tomás Garrido y el Parque Museo de la Venta, incluso reponiendo el sistema de Luz y Sonido. Todavía en el boletín oficial del INAH de la reunión del gobernador con el Director del INAH de octubre pasado se mencionó el rescate del Parque Museo de la Venta y no se mencionó ningún nuevo museo. Después, sorpresivamente, en una reunión del 2 de junio de este año, se dio una reunión entre el Director del INAH, el Gobernador y el arquitecto Enrique Norten del Despacho TEN, donde se presentó un render, un dibujo del edificio terminado, que al público sólo se le compartió como el fondo de una foto del grupo que asistió a la reunión. Eso provocó una reacción muy importante en las redes sociales y se hicieron dos cartas de rechazo en change.org, una de las cuales logró más de 50 mil firmas en un día. El vocero del gobierno politizó la cuestión al plantear el chantaje a los ciudadanos diciendo que los que se opusieran al proyecto serían sólo los opositores a la 4T, idea que ampliaría el propio gobernador, cuando en realidad el proyecto ha generado una división entre los miembros y simpatizantes de la 4T en Tabasco. Y tras esto, los empleados públicos en privado piden oponerse al proyecto aunque en público hasta hacen tictocs en favor del proyecto. El gobernador dijo que el proyecto no está terminado y uno de sus secretarios dijo que no existe. Pero no explicaron entonces cómo se hizo el render que se presentó sin tener ya hechos los planos del proyecto y sin haberle pagado al Despacho TEN. Y finalmente el gobernador dijo que él le decía sí al proyecto y que cuando estuviera terminado se haría una consulta pública. Es decir, a toro pasado. La sociedad civil respondió con una asamblea y dos marchas de 500 y mil personas el siguiente fin de semana. Entregaron un oficio de solicitud de información. En respuesta el funcionario Ulises Izquierdo se comprometió a que el Secretario de Gobierno recibiría a los solicitantes en una reunión abierta que podría transmitirse por Facebook. Pero el miércoles a los representantes se les quitaron los celulares y se les respondió que no se tenía ninguna información, que si querían información la solicitaran a transparencia y regresaran en un mes. Después la Asociación local de hoteleros, el Colegio de Arquitectos, el Comité Coordinador Empresarial y la Asociación Nacional de Agentes de Viajes se manifestaron en contra de la localización del proyecto. El delegado del INAH en entrevista afirmó que se tirarían unos “pocos arbolitos” aunque una foto de Google Earth de febrero demuestra que la cobertura arbórea es pareja desde Paseo Tabasco hasta el estacionamiento del Museo de Historia Natural.  Y se descubrió que ya el gobierno había decretado el traslado administrativo de los animales -definidos como ”activos orgánicos”- de la Secretaría de Cultura a la de Medio Ambiente, declarándolos la primera como “no útiles”. Los animales degradados a cosas.

Después de eso, para asegurar la obediencia de funcionarios y empleados, se corrió el rumor de que se trata de una propuesta de Andrés Manuel López Obrador, que la líder local del PRI está capitalizando.

Una Ciudad Petrolera, Destruir para Construir: Tabasco fue un caso internacional de estudio porque en los años 70, cumpliéndose todos los elementos para ser un exitoso polo de desarrollo, los organismos internacionales como el BID, el Banco Mundial y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo se sorprendieron porque la población se rebeló con el Pacto Ribereño. El primero movimiento popular interclasista ecologista del país. De ahí la ONU mandó hacer varios estudios, el informe de uno se tituló La Modernización Forzada de Tabasco. Fue tan importante la repercusión del caso de Tabasco que fue considerado para que en 1982 se concibiera desde el organismo la idea de Desarrollo Sustentable. Y en México CONACYT le hizo un Plan de Gobierno a Enrique González Pedrero bajo la idea alternativa del Ecodesarrollo. Sin embargo, éste sólo pudo actuar de manera marginal y remedial. Pero en la ciudad de Villahermosa se construyó el Parque Tomás Garrido y el Centro de Convivencia Infantil. Que envolvieron a otro fruto del petróleo: el Parque Museo la Venta. Este lo diseñó y construyó en su papel de museólogo el poeta Carlos Pellicer. Quien gestionó el rescate de los monumentos que iban a ser destruidos por la construcción de una petroquímica y una pista de aviación, consiguió el apoyo y la maquinaria para trasladarlas a Villahermosa, y diseño un original parque museo que definió como poema, reforestando una parte del viejo parque Tabasco, para reconstruir a propósito un ambiente caótico de selva incluyendo varios animales locales. El Parque tiene múltiples facetas: Parque, Museo, zoológico y zona ecológica, bajo un diseño de inspiración poética. Luego entonces se trata de una obra de arte original que vale por sí misma en conjunto con las obras, los árboles y los animales. Es un conjunto, que además fue diseñado como un ser vivo que tendría transformaciones como una selva viva. No es desmenuzable ni despedazable en “piezas”. Y se convirtió en la única cosa porque es conocido Tabasco. La única razón porque llega turismo al estado. Lo mismo pasa con el “Tomás Garrido”, es otra obra estética que ha cumplido el exitoso objetivo de ser lugar de reposo, relajación, placer, entretenimiento y convivencia con la naturaleza para la población en general y sobre todo para la población pobre de la ciudad y del estado.

              Habiéndose convertido por la modernización forzada la ciudad de Villahermosa en una ciudad petrolera de escasos espacios públicos y naturales, y sobre todo accesibles a las familias pobres, el conjunto reformulado por González Pedrero es un ejemplo de una exitosa acción de gobierno en beneficio del pueblo y uno de los pocos frutos de beneficio directo que dejaron los recursos petroleros del boom. Al construir en 14 700 mts2 se está borrando de un plumazo no sólo las obras benéficas de anteriores gobiernos, sino la propia historia reciente del estado.

El Problema de la Conservación también es petrolero. Una de las formas que usa el capital para destruir, desvalorizar, desimbolizar, desnaturalizar un espacio, arrebatarlo a la población para hacer un negocio privatizando o construyendo algo nuevo, es desmenuzar. Así, el último argumento al que se aferran los empleados públicos es el de la “conservación de las piezas”. No hablan de la conservación del Mueso ni del Centro de Convivencia, ni de la continuidad de la zona arbolada. Sólo importan las piezas, no el conjunto, no el espacio vivido a donde recurren las familias tabasqueñas, en particular las más pobres que vienen con sus niños de desde colonias populares y comunidades. Pero además, privilegiar el pasado remoto al presente es un rasgo común del colonialismo: atraer a los turistas no a que vengan a ver y vivir nuestra vida actual, sino que sueñen con quienes desaparecieron hace mil años. Y sí, hay que conservar las piezas, pero se está encubriendo que su acelerado deterioro se debe a la lluvia ácida de la que es tabú hablar en Tabasco a pesar de que lleva 50 años dañando la salud de todo el estado al grado de que en 1999 el informe Batelle concluyó que ya había incluso cambiado el ph de la tierra del estado. Para la conservación verdadera se necesita detener la lluvia ácida.

              Una última línea que siguen los voceros del proyecto es que los animales están encarcelados actualmente y entonces es mejor enviarlos al parque Yumka. Sin mencionar que en tal instalación han muerto 233 animales entre 2018 y 2023.

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