jueves, 22 de noviembre de 2012

Adicción II

Atravieso capa tras capa de cansancio como los prados de una llanura, la falsa monotonía de un paisaje plano. Avanzando se abren dimensiones tras dimensiones, nuevas sensaciones cada vez más intensas, profundas abriéndose a un horizonte cada vez más dilatado donde surgen nuevos sentidos y motivaciones con cada oleada nueva, con cada marea que experimento. Me consuelo pensando que cada nueva dimensión es otra dosis renovada de LSD.

Insomnio

El insomnio nos introduce al espacio sagrado porque nos abre la noche al infinito, anula el tiempo y la diferencia entre lo dormido y lo despierto, abole barreras, se vive en lo que no es diurno ni nocturno. Es viaje, transcurso sin destino, sin movimiento, inagotable, e inevitablemente se convierte en abierta lucidez de verdades secas, demasiado evidentes que inevitablemente, exáctamente igual que al salir de un trance, se olvidarán. No es fantasía, es sobrerrealidad, demasiada realidad, demasiada intensidad como en un viaje...Pero es un viaje en seco, duro, neto, real, que puede no acabar, se puede conectar en lo infinito de las innumerables noches...

martes, 6 de noviembre de 2012

Hecho imperfecto

La vida es siempre un hecho imperfecto.

Odd Situation

Odd situation:


 To make ends meet you need first to let them all get loose.

lunes, 15 de octubre de 2012


PLAN HÍDRICO Y LA SUPERVIVENCIA DEL ESTADO DE TABASCO.

 

            Contexto y Situación:

Viabilidad de Tabasco:

La historia de Tabasco en el siglo XX es la de la construcción y destrucción de una región. Lo que está en cuestión es la viabilidad de Tabasco. Hablamos de sustentabilidad, pero lo que está hoy a discusión en las instancias de planeación y programación como lo demuestra por ejemplo el estudio de la CEPAL de la inundación de 2007, es la viabilidad del estado. Los elementos de problematización de esto son los siguientes:

 

Teórico-Ideológicos:

-En la globalización los estados nacionales no sostienen a las regiones, y las regiones compiten entre sí.

-Las regiones que no pueden sustentarse deben de desaparecer. Es irracional subsidiar el sostenimiento o existencia de una región que no produce sus propios recursos.

-Los estados compiten por la localización de recursos y actividades con sus ventajas comparativas (recursos naturales, ambientales, culturales, localización en redes comerciales, fiscalización amigable, bajo coste mano de obra).

-Los factores decisivos hoy son: composición sistémica local de espacios de producción (Clusters) y calidad intelectual y de capacitación de la mano de obra. Ambos son vistos como “espacio” o “ámbito” general, “contexto” para desarrollo de actividades. Por eso el desarrollo ahora es “urbano”, centralizado en espacios urbanos complejos fuentes de iniciativa, innovación, originalidad y creatividad. Y eso es lo que hoy se entiende por “Cultura”. Por eso las ciudades globales son “culturales” y la “cultura” es hoy la mayor fuente de capitalización. Papel central de universidades e instituciones culturales posmodernas.

 

Contextuales Nueva Regionalización:

1) En nueva organización espacial Tabasco ya no es la puerta del Sureste sino mero corredor de paso entre Guatemala-Chiapas al D.F y Sureste de Estados Unidos.

2) Políticamente se le desconoce su aún importante lugar en la producción de energía y su derecho a ser resarcido por los costos de producción de la misma, sobre todo ambientales.

3) En los hechos Tabasco le ha dado la espalda a la integración Mesoamericana a la economía inmaterial: turismo, cultura y medio ambiente.

4) Tabasco es inviable por los altos costos para sostener su sistema hidrológico.

5) Acostumbrados a subsidio federal, Tabasco ha sido siempre lugar de extracción de capital, nunca de reinversión, sobre todo para sus propios habitantes.

6) Nulo desarrollo de capital humano local encubierto por cultura de autocomplacencia y limitación de espacios públicos sociales, culturales, urbanos y políticos.

7) En las condiciones actuales de ideología y teoría económica no le ven viabilidad a Tabasco, invertir en obras hidrológicas es tirar dinero bueno al malo: “la gente se metió al camino del agua y se debe de salir”. Con menos población Tabasco se vuelve todavía más políticamente irrelevante en el contexto nacional.

 

El Reto consiste entonces en:

-producir los recursos para sostener su sistema artificial de control hidrológico.

-reinsertarse en la nueva organización regional imponiendo alguna forma propia de centralidad (complejidad y complementariedad productiva y oferta de servicios complejos) distinta a la asignada programáticamente.

-tiene que hacerlo en el contexto de una devastación ecológica y escasez de recursos producida por los desarrollos anteriores.

-esto implica una estrategia diversificada que como novedad necesita desarrollar los elementos sociales y ambientales para el desarrollo de un capital humano verdaderamente competitivo en términos internacionales (actualmente no lo es ni a nivel regional), y aprovechar rentable y sustentablemente sus recursos paisajísticos y culturales.

 

            Tabasco destaca por ser una región que en el siglo XX fue objeto de varios e importantes proyectos dirigidos, deliberados, de transformación territorial con objetivos económicos, en lo que en el siglo XX conocimos como Desarrollo. La Condición y situación de Tabasco puede entenderse comparando la distancia entre los proyectos y los diagnósticos. Como diagnósticos contamos con las recomendaciones de la CNDH y cuando menos dos trabajos científicos: el informe del Centro de Ecodesarrollo de 1982 y el del Instituto de Naciones Unidas para el Estudio del Desarrollo Social publicado en 1989. Con esta información podemos ver claramente la distancia entre la visión del desarrollo como una mera organización de los factores de producción y sus resultados como condiciones para la vida en general y la sociedad en particular.

 

 

La Situación del Plan Hidráulico actual

 

Cuando se formuló el proyecto de las obras de control hidrológico para Tabasco por parte del Ing. Echegaray Bablot quien trabajó desde 1935 en ello, aunque se tenía la idea de copiar los objetivos de las obras en el río Tennessee de liberar importantes extensiones de territorio para actividades económicas, el modelo que se menciona persistentemente es el de Holanda, donde se tiene consciencia de que se construye una estructura artificial para mantener libre de agua, incluso estando a una altura menor que la del mar, un territorio que incluye importantes ciudades. Lo hecho en Tabasco quiso ser una mezcla de ambos proyectos, pero una diferencia que a largo plazo ha sido muy importante, es que mientras en el caso holandés se tiene consciencia de que es un sistema artificial que requiere de permanentes ajustes y sobre todo mantenimiento, en Tabasco se ha mantenido la falacia de que es una región todavía totalmente determinada por la naturaleza lo que ha servido para descuidar la idea de mantenimiento y ajuste. Todavía en los años 80 se recordaba mucho que la vida de las presas útil de las presas era de alrededor de 30 años; pero luego, además con el cambio ideológico del neoliberalismo y la globalización, ahora, por ejemplo, es imposible conseguir la información sobre como ha bajado la capacidad de almacenamiento de agua en virtud de la sedimentación, e incluso cuestionados directamente, tanto los ingenieros del Instituto de Ingeniería de la UNAM y los técnicos de Comisión Federal de Electricidad y de Conagua dan respuestas de una lógica insostenible y en todo informe o explicación dan cifras como si las presas todavía retuvieran el 100% de su capacidad original.

            La idea de mantenimiento y ajuste nos lleva directamente al problema de los costos y del origen de los recursos para sufragar esos costos. En el caso del río Tennessee la obra fue financiada centralmente desde otra región que sostiene su costo con recursos financieros nacionales, pero en el caso de Holanda, los recursos para sostener el mantenimiento del sistema viene de actividades financieras y comerciales que la han sostenido. Por eso, considerando los modelos de desarrollo económico, en toda esta problemática se vuelve central la cuestión de la producción, origen, distribución y uso de los recursos económicos para el sostenimiento de este tipo de sistemas. Con la ideología neoliberal, ahora se espera que cada región se sostenga a sí misma y busque ya no su incorporación a un sistema nacional como lo logró Tabasco a partir de los años 70, sino que encuentre su nicho de inserción en espacios macrorregionales de economía global para obtener recursos. Bajo esta ideología, los documentos de planeación regional para el Sureste de México, explícitamente no consideran por ejemplo que el sostenimiento de la sustentabilidad de Tabasco o los problemas del crecimiento urbano de Cancún deban ser apoyados con recursos provenientes de la federación o de organismos internacionales. Esta nueva perspectiva se tradujo inmediatamente, desde el sexenio de Carlos Salinas en que, como ahora se sabe, se dejó de dar mantenimiento a las presas y en todos los puertos del Golfo de México se dejó de dragar la boca de los ríos. Esto último, por ejemplo, según el Secretario de Obras Públicas de Veracruz, explica suficientemente la inundación nunca vista del centro histórico de Minatitlán. Este tipo de decisiones basadas meramente en criterios ideológicos financieros, ignoran por ejemplo, que según demuestra la historia, todos los puertos mexicanos del Golfo de México fueron obras artificiales sostenidas por un constante mantenimiento del dragado de las bocas de los ríos desde finales del siglo XIX, son hechos artificiales.

            A diferencia de Holanda donde se hace motivo de orgullo la artificialidad del sostenimiento de la región, en Tabasco todavía hasta hoy ha privado el discurso y la visión de que se trata de una región determinada y dominada por la naturaleza, y con esto, en su caso, se ha cubierto la responsabilidad de decisiones u omisiones de técnicos y políticos que han tenido efectos en inundaciones, como reconoció el ingeniero Rovirosa para el caso de la inundación urbana de 1979, o como se quiso ocultar la importancia de rellenar los vasos reguladores y destruir bordos urbanos en la de 1999.

            Este discurso de predominio de lo natural ya desde documentos de 1993, servía para que la entonces CNA dijera que el problema era que Villahermosa estaba en un embudo por donde salía la mayor parte del agua de la planicie, sin recordar que ese embudo en parte fue resultado de la decisión y objetivo de desecar a la Chontalpa Grande considerando que las obras de los años 50 bastaban para defender a la ciudad. La consciencia de que se habían concentrado las aguas en una sola salida, era tan clara que por eso de proyectó y comenzó a construir lo que en ese tiempo se llamó el Canal Samaria-Golfo, y a cuya inconclusión se le ha achacado parte de la problemática actual.

            El asunto de los costos tiene que ver porque lo que hoy se presenta como Plan Hídrico Integral para Tabasco, lo que fue publicado como tal, alrededor de 3 mil páginas de ensayos varios de diferentes investigadores, con múltiples contradicciones y sin un informe ejecutivo organizador, en realidad se reduce a 3 conjuntos de obras:

-Las ventanas o escotaduras en el sistema zapotes-Grijalva

-La estructura de control del Macayo que desvía el agua del río Carrizal al canal Samaria.

-La terminación de la construcción de los dos bordos del canal Samaria hasta la altura de Oxicaque.

 

El resultado como está proyectado de esta manera parcial y como se ha venido construyendo, es, como se hizo evidente en 2010, es que el objetivo único es la protección de la ciudad de Villahermosa, y a cambio concentra toda el agua en la zona de la laguna de Santa Anita anegando sin control todos los pueblos indígenas chontales desde Simón Sarlat hasta Oxiacaque y Vicente Guerrero. Se presenta como Plan de Acciones Urgentes, pero en realidad aparece como un plan recortado frente al proyecto original de 1997. Además, como estrategia para desfogar las presas anticipadamente, desde 2008 hasta 2011 se mantuvieron inundadas las tierras de trabajo de esta zona indígena fuera de las fechas tradicionales de inundación durante todo el estiaje, desde abril hasta octubre, quebrando la economía de estas comunidades.

            Sin embargo, el sacrificio de estos pueblos, que en los hechos configura el delito de etnocidio porque va a terminar obligando a los pueblos yokotanob a emigrar por hambre, no asegura que en un evento extraordinario, las crecientes mayores del ciclo decenal, Villahermosa vaya a quedar protegida. Tanto en el documento de 1997 como en el de 2009 se señala que es un gran error canalizar toda el agua por una sola salida, pero es lo que se está proyectando en los hechos. Pero además, si bien el canal Samaria se proyecto originalmente hasta su salida al mar, incluso en tres posibles versiones, según el plan de 1997, lo que se está haciendo ahora, y expresado por boca del vocero local de Conagua y el ingeniero encargado en campo, sólo tiene planes de obras hasta Oxiacaque. Es decir, que toda el agua del Mezcalapa se transportaría hasta Oxiacaque donde se liberaría hacia la Laguna Santa Anita, y por el otro lado, cruzando el Grijalva se canalizaría por las ventanas o escotaduras toda el agua de la zona del Río de la Sierra y el Tulijá-Chilapilla sobre Simón Sarlat y eventualmente la laguna Santa Anita. Como podemos ver en el diagrama del PHIT, no se considera la suerte de estos pueblos, ni se aborda el problema de la salida al mar, que sí se planteaba en el Plan de 1997.

            Pero el Plan de 2009 menciona que en un evento extraordinario podría bajar una cantidad de agua semejante a la del Usumacinta que golpearía con toda su fuerza el Macayo, de ahí rebotaría hacia el Samaría que a su vez avanza nuevamente en línea recta hacia Villahermosa donde chocando contra un bordo que no está terminado y tiene una figura visiblemente irregular, daría vuelta en un ángulo de 90º. Todo un reto para la infraestructura.

            El Plan de 2007 en cambio recomienda construir varias opciones de salida al mar que van desde activar un vertedero adicional desde la presa de Malpaso, con un cauce que puede conducirse hasta el río Tonalá, se menciona la posibilidad de conducir agua hacia la Laguna del Rosario y de ahí derivar también hacia el Tonalá, e incluso la posibilidad de reactivar el Río Seco desviándolo de las ciudades. Llama la atención, y tiene que ver con el sesgo productivista que se ha seguido y el carácter de símbolo que tiene el Plan Chontalpa, no se menciona que es muy clara la posibilidad de canalizar excedentes a través del Plan, ampliando varios canales. De hecho ya existen dos entradas de agua del Mezcalapa a la red de canales del Plan, y en enero de 2011 ya Conagua estaba limpiando el canal El Naranjero que saca el agua del Plan al mar.

            Es decir, que lo que estamos viendo es una visión recortada de las posibilidades de acciones a tomar incluso desde esta perspectiva de grandes construcciones. La gente del Instituto de Ingeniería explica que lo desarrollaron con base a las posibilidades de presupuestación que se les dieron. Y en esto hay que pensar que se actuó mal desde la perspectiva científica porque en principio el sector científico tendría que problematizarse libremente todas las posibilidades para explorar su factibilidad, y después ajustarse a los posible y costeable, y no al revés. Y sobre todo cuando existe un antecedente como el Plan de 1997, que aporta otras opciones.

            Más allá de esto ambos planes son criticables y están incompletos por su muy inadecuada y pobre incorporación de las problemáticas ambientales y sociales. En ninguno se considera seriamente la prospectiva de los cambios que pueda producir el cambio climático, no se considera la característica más particular de la planicie tabasqueña que son sus ciclos metereológico/hidrológicos anuales y decenales, que son básicos para toda esta problemática.

            Por ejemplo, se dice que nunca se ha operado una estructura de control del Macayo y que va a ser todo un reto, entre otras cosas se menciona que se hará necesario mantener el nivel del Carrizal debajo de la estructura al mismo nivel durante todo el año para que no se caigan los barrancos de las orillas, lo cual en una región donde hay mareas anuales y diarias como Tabasco será un reto.

            Lo que el PHIT presenta como estudios sociales no son sino meros recuentos demográficos de la población que de los 28 pueblos que tendrán que ser removidos para el funcionamiento del Canal Samaria.

            Además en el PHIT no se menciona al río Usumacinta, incluso en el Plan de 1997 sólo se hace una mención superficial. No ha habido estudios serios sobre la problemática del Río Usumacinta e incluso el plan de construir 5 presas sobre el río surgió del Banco Interamericano de Desarrollo como parte del Plan de Interconexión Eléctrica de Centroamérica que simplemente apuesta a incrementar la oferta de energía a nivel regional. Pero no se conoce o no es púbico o no existe el estudio que demuestre que tal energía es necesaria, o que efectivamente su oferta desencadenará procesos de desarrollo. Eso no esta ni probado ni demostrado. Lo que sí está demostrado es que se construyen presas en todo el mundo por meros motivos especulativos para beneficiar a las grandes constructoras trasnacionales, las obras de John Perkins, nos explican como se da este proceso. En todo caso, las presas para el Usumacinta jamás han sido propuestas o planeadas para el control de las inundaciones extraordinarias.

 

            Luego entonces, se hace necesario que avancemos hacia dos transiciones conceptuales. La primera, más cercana, es incorporar los criterios ambientales ya ampliamente conocidos, para el control de las inundaciones extraordinarias, es decir, que al hablar del Usumacinta consideremos que detener los ciclos anuales y diarios de marea implican destruir el hábitat único de los Pantanos de Centla, que es uno de los mayores recursos de desarrollo moderno, en el sentido de su aprovechamiento paisajístico, turístico y científico con que cuenta Tabasco; y por supuesto, no destruir ni la selva Guatemalteca ni las zonas arqueológicas a ambos lados de la ribera, ni el cañón de Boca del Cerro. En el lado del Grijalva, se hace necesario también incorporar de manera seria estos elementos y rompiendo la ilusión tecnocrática de las grandes obras monumentales, hacer grandes programas integrales de reforestación, de cuidado de la cobertura vegetal y conservación de suelos, más desazolvamiento de los cientos de canales pequeños, y corregir todas las retenciones de agua y distorsiones que provocaron en los años 70 y 80 los caminos, canales y ductos de PEMEX para rerracionalizar la circulación de agua. Esto es posible, viable y se tiene que hacer apoyando a los propietarios y usuarios de la tierra, desde los grandes hasta los pequeños campesinos y hasta a los pescadores libres que explotan racionalmente los pantanos con técnicas y actividades tradicionales.

            Esto también se tiene que apoyar con formas nuevas de asociación para la producción para aprovechar las nuevas actividades rentables de la globalización como son el turismo cultural y el turismo ambiental que sólo se hace posible asociando a las comunidades con los grandes transportadores y hoteleros turísticos, es un gran reto dada la experiencia estatal, pero es un paso difícil y necesario; que en lo cultural, y ya incluso a nivel urbano, se hace necesario, que como en Campeche y Yucatán, los capitalistas privados locales inviertan en infraestructura y ornamentos, atractivos y actividades que constituyen los atractores del turismo contemporáneo.

            Dadas las condiciones ambientales, se hace necesario también que se le de una vuelta al revés a la costumbre económica tabasqueña de basar todo en la extracción y explotación de recursos necesarios con un nulo desarrollo de la calidad del capital social, para lograr un desarrollo de actividades de la economía inmaterial, de la sociedad de la comunicación y de la cultura, dada la imposibilidad e inadecuación del desarrollo de industria pesada; sin dejar, por supuesto de aprovechar el lugar todavía muy central que tiene la actividad petrolera y gasera en la región, pero respetando las normativas ambientales para que deje de generar el impacto suicida que sigue teniendo en el área.

            Y finalmente, los más difícil, tenemos que imaginar, crear, inventar, la manera de dejar de ver al agua como un excedente del cual sólo queremos deshacernos, para entenderla, verla y aprovecharla como un recurso en la nueva economía y situación del siglo XXI.

 

 

 

lunes, 24 de septiembre de 2012

          Taxco, Sueño de M.C. Escher.
Taxco es la materialización de los sueños que M.C. Escher plasmó en sus grabados. Es la progresión del orden, reiteración, geometría, y fuga hasta la obscesividad que alcanza el absurdo.

Una jóven arquitecta le explica a los visitantes que la ciudad es así porque nadie la planeó sino que ha crecido con una mera lógica de agregación mediante la autoconstrucción, y en ésta "cada quien quiere imitar lo que ve, lo que hace el vecino, lo que han hecho otros, lo que se supone que es lo que considera que hay que hacer".

Pero al intentar copiar en un terreno diferente, aunque sea el de junto, con la irregularidad de la montaña va cambiando el terreno, y no se cuenta con los mismos recursos, con los mismos materiales.


Entonces,  a pesar de la obsesividad de copiar, de crecer por acumulación, sumar cajones, cubos, prismas, ángulos rectos, terrazas, no se obtiene la semejanza que daría imagen de estabilidad. Por pura agregación toma la apariencia de movimiento, una misma figura en fuga. Da la impresión incluso de una espiral que va hacia ninguna parte y donde el modelo edificio por edificio, casa por casa, cuarto por cuarto, terraza por terraza se va distorsionando...









Y al mismo tiempo, el alejamiento llega al grado de que ya nadie recuerda cual era el modelo original, el edificio primigenio, referencia por referencia, testimonio por testimonio, se descubre que en realidad nunca existió, fue un arquetipo imaginario al que ya no se puede acceder para hacer la corrección necesaria.





El resultado es una geometía obsesiva y reiterativa, fractal, imposible, que finalmente, en su lógica de ángulos rectos y objetos, edificios, casas y cuartos cuadrados con sorpresivas irrupciones naturales de verdor, termina, en última instancia, sin explicación posible, pero con evidencia inmediata y visible, sin necesidad de demostraciones ni pruebas; centrada, organizada, incluso diríamos anclada, amarrada, verdadero atractor de orden, por el edificio singular, único, por todo lo contrario, por las torres y portal barroco, churrigueresco de la catedral.






lunes, 17 de septiembre de 2012

Carta de Navegación

Aves, piedras, árboles, la espuma se excita inútilmente en torno al blanco islote devastado en el tiempo y la memoria de los que pasaron, los que pudieron recordar. El ruido del agua es múltiple, no es uno el paso del río: está el batir próximo y constante de los rápidos, las brazadas medrosas sobre la piedra que cierra el estanque del recodo, la fricción del volumen que vanza simétrico, compacto y estable, los chapaleos que hablan de lo azaroso en el cuerpo, lo que siendo lo mismo permanece por lo variable, el pequeño y efímero desvío que define el eterno curso, el subri y bajar, rodear, golpear inconstante, y más aún el ruido que no se oye, el permanente, el que lo es todo, o quizá meramente pasos que nunca se acercan ni se alejan, hojas que tropiezan en su caída libre, rumor de ramas y enredaderas, cortinas vegetales, tapices de musgos, terrazas de orquídeas y hongos enormes que escalonan la vertical columna del tronco.

 
Ruidos que se meten por los brazos y toman el ritmo de la sangre. Iguana que fractura la alfombra de hojas secas. Flores que ensucian el tapete verdoso. Lodo de tierra que se resiste a ser arena. Quise hundir de costado el cuerpo hasta mojarme los hombros y mirar el cielo, la pared flecada de los cerros y sus despeñaderos arbóreos abrazados al basalto.


Avanza en el desorden pedregoso la culebra del reflejo y rompe la fruta madura la urdidumbre vegetal. ¿Qué sonido distingue al hombre?

Repican en lo alto las tijeras de la tarde, llamadas pasan zumbando como cables energizados y alternan con el timbre de insectos desvelados. Gana el color el agua con el sol que se dobla, azul en sombra, verde al descubierto. Doradas las piedras y troncos, el verde es oro nuevo en el engaste negro del lodo iris del basalto.

 
Los árboles solitarios en el limite del pastizal, guardianes del torrente, y sus pesados ropajes estampados y sus innumerables collares, mujeres graves y enjoyadas, o sacerdotes de anteriores eras (hoy el templo los viste, los agobia, a la larga, los seca). Quedarse, persistir, soportar. Es sólo un sonido. El del tiempo que no se mueve. Un sonido que creció con la selva, que construyó civilizaciones que miraban estrellas y conocían el inframundo. Los constructores de la escalera del día de 13 escalones.
 

Un pedazo de corteza es tortuga muerta al azar de los remolinos. El río huele a tortilla reciente. Las guías de las enredaderas vibran señalando con insistencia. Llegaron niños con voces de la tarde. Abordaron un tronco y treparon a la galería veteada por frutos que no encontraron. Con estar ahí, el extraño es ya un ser deforme -su traje de ciudad-, una caricatura de algo, un ser de otra creación, madera retorcida, chango o toloque para mirar y callar. Trepados en la copa los niños flotan sobre la corriente, inclinan con su peso las ramas que acarician el agua. Lianas, nudos de varejones y bejucos, suculentas lanzaderas con sus hojas corazón, sus hojas flecha, lengua o palma abierta. Son invitación y memoria, mil cuerdas de suicidas arrepentidos.
 
Retirarse tropezando con indeseadas caricias. Ramas que se mimetizan como víboras para no ser pisadas. Hundida en el lodo la vegetación mordisqueada y manchada de viejo parece aplastada por una antigua catástrofe, una violencia sin memoria. Las raíces de la ceiba abrazan rocas navegantes, cabelleras que aprietan, ocaso.
 
En el reloj improbable, en la máquina no el sonido, aparece la recuperación de las sucesiones, el tiempo de lo mesurable, el que avanza y establece dirección cuando, en realidad, aquí, a la vida, no fue todo sino parpadeo o trago de agua, sendero polvoso y sol en la frente, agacharse bajo la sombra de viejos cacaos, mujeres lentas con sombrillas negras de sol, caballos que adivinan el vado y cruzan tanteando y el ganado que saluda al vientre opaco de mi ojo inservible.
 
Cerveza tibia como muslo moreno y espera. En la pequeña tienda se habla de un niño tierno que murió de pulmonía con el frescor de la madrugada y la imagen de un velero en mar azul del calendario es un hoy que remite a otro tiempo en el lugar y la memoria. Los caballos beben sin prisa también. A este hombre le duelen las marcas de los dientes de la serpiente que no mordió su pantorrilla.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Vivir en el D.F. Cuento Surrealista Contemporáneo.


Hace 11 minutos
Eloísa Rivera
Vete a delegaciones poco concurridas, y ahí todo es rápido (o sea, evita Coyoacán, Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo)


Edmar Ariel Lezama
Yo lo saqué en GAM sin cita sólo con llegar muy temprano.

Hace 10 minutos
Marianna Jaramillo
dicen que Venustiano Carranza también es super rápido!


Hace 7 minutos
Muchas gracias!Ariel, hace cyuánto lo sacaste en GAM?


Hace 6 minutos
Evita coyoacan y Benito Juárez son la locura.


Hace 6 minutos
ES QUE YO FUI HOY (no fui temprano, es cierto) y me dijeron que sólo con cita, y en internet solo hay cita para dentro de 15 días!


Hace 3 minutos
conviene estar checando el portal de internet constantemente, pues hay cancelaciones de último momento y se abren espacios

Hace un minuto aproximadamente
Una vez me dijeron que si dices que es urgente te dejan pasar, y si, ve a donde hay poca gente
 
Mil gracias a todos, seguiré sus recomendaciones, deséenme suerte.
 
 
 

lunes, 20 de agosto de 2012

Una Tarde de Gracia 1





David Brooks muestra efectos no deseados de la polisemia y polimorfismo del Rock

American Curios
Rock electoral
David Brooks
Foto
Paul Ryan, compañero de fórmula del aspirante republicano a la Casa Blanca, Mitt Romney, ha declarado que le gusta el sonido de la banda Rage Against the Machine, pero no sus letras, a lo que Tom Morello, el guitarrista del grupo, ha respondido que a él no le gustan ni el sonido ni las letras del político. En la imagen, el representante federal en su faceta de cazadorFoto Ap
E
sta es una elección que aún no tiene ruta sonora. Las campañas han probado con rock, country, un poco de salsa mezclada con norteño y, a veces, algo light para no interrumpir cocteles sólo para millonarios interesados en la democracia, aunque, dadas las perspectivas y la calidad del debate, tal vez deberían recurrir a un blues muy simple. Algo que, con cada día de discursos y ataques, maniobras y promesas, se oiga “le dicen lunes tormentoso/pero el martes está igual de peor…”
Eso sí, los candidatos presidenciales y otros políticos y sus estrategas intentan imponer su música, a veces en contra de los deseos de los músicos, e invitar a músicos (y otras estrellas) que ellos saben que inspiran mayor confianza y respeto entre el electorado que ellos.
En las campañas electorales, escoger la música para identificar al candidato es parte clave de la estrategia, es la expresión de su mensaje. También lo que escuchan los candidatos es algo que se utiliza para efectos propagandísticos. Pero a veces hay contradicción entre políticos y músicos.
Paul Ryan, quien acaba de ser seleccionado por el candidato presidencial republicano Mitt Romney como aspirante a la vicepresidencia, o sea, su compañero de fórmula, es un representante federal conservador que promueve anular el incremento en gastos de defensa y algunos de los programas sociales prioritarios de este país, y reducir los impuestos de los más ricos. Ya había expresado que una de sus bandas favoritas era Rage Against the Machine (el nombre se puede traducir como Furia contra la máquina). Para Tom Morello, el gran guitarrista de la banda y participante en luchas sindicales, en el movimiento Ocupa Wall Street y en los otros movimientos indignados del mundo, quien en su guitarra tiene grabado armen a los sin techo, esto fue too much.
Es entretenido el amor de Paul Ryan por Rage Against the Machine, ya que él es la encarnación de la máquina contra la cual nuestra música ha estado enfurecida durante dos décadas, escribió en un artículo publicado en Rolling Stone. Ryan dice que le gusta el sonido de Rage, pero no la letra. Bueno, a mí no me gusta el sonido de Paul Ryan ni sus letras. Le pueden gustar las bandas que quiera, pero su visión de trasladar ingresos de manera más radical al 1 por ciento es antitética al mensaje de Rage. Me pregunto cuál canción de Rage es su favorita. ¿Es esa en la que condenamos el genocidio de los indígenas estadunidenses? ¿O la que golpea al imperialismo estadunidense?.... Morello señala que entiende que Ryan está lleno de furia, furia contra las mujeres, los inmigrantes, los trabajadores, los gays, los pobres, el medio ambiente, pero eso sí, no siente ninguna rabia contra los más ricos. Al final se burla sugiriendo que tal vez Ryan es un infiltrado que de verdad entiende la música de Rage, y que al ser elegido llenará Guantánamo con los empresarios criminales que están financiando su campaña... y después los torturará con música de Rage 24 horas al día, siete días a la semana.
Morello no es el primero en sufrir algo así. Vale recordar que su gran amigo Bruce Springsteen, con quien colaboró en su último disco, tuvo que pedir que el santo de los republicanos, Ronald Reagan, dejara de usar su gran canción Born in the USA como uno de sus himnos de campaña; la gente de Reagan simplemente no escuchaba la letra y pensaba que era un himno patriótico cuando era una rola furiosa contra las secuelas de la guerra de Vietnam para los veteranos y el alma estadunidense.
También esta semana Silversun Pickups exigió que la campaña de Romney suspendiera de inmediato el uso de su canción Panic Switch.
Les ha pasado lo mismo a muchos más en años recientes: David Byrne tuvo que demandar que el ex gobernador de Florida Charlie Crist dejara de usar su rola con Talking Heads Road to Nowhere en su campaña electoral. Tom Petty demandó que la candidata republicana Michele Bachmann dejara de usar su canción American Girl. Jackson Browne y Foo Fighters tuvieron el mismo lío con la campaña de John McCain hace cuatro años. Bobby McFerrin solicitó que George Bush padre dejara de usar Don’t Worry, Be Happy. Sting también, contra George Bush hijo. La lista es larga.
A la vez, los músicos también figuran para apoyar campañas tanto con su música como con su presencia. La lista de músicos que apoyan explícitamente la campaña de Barack Obama es larga: en 2008 fueron prominentes: Springsteen, John Mellencamp, Black Eyed Peas, Jay-Z, y hasta Pete Seeger. Springsteen ha dicho que está un poco decepcionado de Obama y que no participará de la misma manera este año. Pero se han sumado: David Byrne, Marc Anthony, Lady Gaga, Mick Jagger, Alicia Keys, BB King, Beyonce Knowles, Ricky Martin, Barbra Streisand, y hasta hay una agrupación de DJs por Obama.
El talento del lado de los candidatos republicanos (no todos con Romney) es, pues, de menor calidad según este crítico, pero igual jalan a sus bases: Kid Rock, Gene Simmons (de Kiss), el rapero Prodigy, Joe Perry (Aerosmith) y Dave Mustaine de Megadeth, quien recientemente se ha sumado a las posiciones de la ultraderecha cristiana fundamentalista y ha dicho que Obama estaba detrás de las recientes matanzas en Colorado y Wisconsin para promover la prohibición de las armas
Hay toda una historia de músicos famosos y presidentes: Frank Sinatra y Marilyn Monroe con John F. Kennedy, Elvis y Nixon, Fleetwood Mac y Clinton, así como también detrás de candidatos presidenciales independientes, como el caso de Patti Smith, Ani DiFranco y Eddie Vedder con Ralph Nader.
Tal vez la contienda electoral debería volverse una obra musical. O tal vez sería mejor idea hacer un concurso como una batalla de las bandas, y que el público votara por el mejor elenco musical.
Por lo menos así uno podría bailar en lugar de escuchar el sonido y la letra de los políticos. Y tal vez de repente, como jazz, algo brotaría para romper con el ruido escandaloso y crear un nuevo concierto en el cual todos estén invitados a ser los compositores.
Añadir un comentario
  • Buen artículo
    Octavio H.
    Muy buen artículo ¿puedes decirme cada cuándo escribes? Me pareció muy interesante y quiero leer más de ti.
    • Periodicidad
      Mariano Soto
      David Brooks escribe para la Jornada todos los lunes

martes, 14 de agosto de 2012

El Gato Blanco en la Tarde Perlada

.El hombre entró violentamente en la recámara. Era media tarde de un día particularmente luminoso a pesar de que llovía.  A través de la ventana el cielo gris perlado reflejaba una luz suave pero muy clara que recortaba los objetos individualizándolos. Se acostó con un inusual cuidado de acomodarse horizontalmente, con la impaciencia de no estar cansado, con la falta de energía de no estar enojado, con la desazón de sentirse derrotado. Sintió de golpe que no tenía nada que ver con el hombre que un mes antes había manejado 2000 kilómetros hasta el desierto y cabalgado al menos un día entero, arriba y abajo por una montaña. Apenas en la mañana se sintió valiente porque había ido a recoger unas impresiones fotográficas justo en la esquina donde el miércoles anterior, menos de una semana antes, habían asesinado a un empresario antes de entrar a su oficina. Y por otra parte no terminaba de procesar que sentimiento era esa sensación que tenía luego de haber visto en la primera plana de los periódicos que el alcalde electo de la población de la que partió la expedición al desierto había sido asesinado. La noticia se sumaba naturalmente a que en otro de los pueblos visitados había aparecido una camioneta con doce cuerpos de hombres asesinados, y que relacionado con eso, al día siguiente, se había librado una balacera donde habían muerto otras cinco personas en la misma capital del estado, en la hermosa ciudad donde había disfrutado tanto de la paz de caminar por su Calzada y plazas del centro histórico.

 Pero nada de eso tenía que ver con ese momento. Se sintió irreparablemente viejo e inútil, derrotado por un texto. Era evidente que ya no podía cumplir el plazo fijado. No podía escribir más, no podía inventar ninguna historia. Pensó, que en realidad nunca había servido para eso, que además no era justo consigo mismo el tener que someterse a la misma angustia a cada trabajo, sobre todo con su costumbre de pedir siempre el pago por adelantado para forzarse a terminar sin importar lo que ocurriera. Pero al mismo tiempo era lo único que le importaba hacer. En lo demás no importaba ser tachado de mediocre, cumplir a medias para ir tirando y no sentía mínimamente culpable de fingirse enfermo para liberar tiempo para escribir. En esto no le importaba en nada lo que le dijeran, el calificativo que recibiera. Bastaba con la satisfacción de poder entregar un texto inventado, sacado de la nada,  a tiempo. Eso era todo. Debería matarse. La idea nació con el coraje de la impotencia y se tradujo en una frase: debería matarse. En ese justo momento el gato blanco que apenas unos momentos antes había estado acariciando en su regazo, mientras permanecía frente a la pantalla blanca del procesador de palabras de la computadora, saltó sobre él. Se acomodó a lo largo de su pecho y lo miró a los ojos con sus intensos ojos azules con ese fondo semejante al de los manantiales limpios de las zonas de suelos calcáreas. De hecho se le quedó en la punta de la lengua el nombre del manantial cercano a la ciudad de Campeche donde había visto un color semejante de piedra azul jaspeada. Ojos intensos y serenos. Poco a poco el gato se fue cansando y comenzó a parpadear hasta terminar ronroneando sobre su pecho con los párpados apretados en remedo de una serena sonrisa de sabiduría. Con mucho cuidado para no despertar al animal el hombre extendió el brazo izquierdo para tomar el libro más cercano sobre el buró. Era una novela que no había comenzado a leer y que había comprado porque la publicidad decía que servía para comprender la crisis económica griega. Leyó la primera línea “El gato instalado sobre el respaldo del banco de enfrente, me mira.” Aunque el libro comenzaba con la crisis tras la hospitalización del inspector Kostas Jaritos, se preguntó si Petros Márkaris habría sufrido una crisis semejante, y habría recibido la ayuda de un daimon parecido. Recordó el adagio Beatle: “The love you give is the love you take” y siguió leyendo procurando no incomodar al gato. Concedió que nadie puede pensar tonterías con un gato durmiendo en el pecho.

jueves, 12 de julio de 2012


El Silencio de Cerro de San Pedro, San Luis Potosí.

Lo que impresiona de Cerro de San Pedro es el silencio. Sería de esperarse de un pueblo que las guías turísticas anuncian como fantasma. Pero es otro silencio al que espontáneamente se unen las familias de turistas que llegan del muy cercano San Luis Potosí: es el silencio denso de la familia que tras un pequeño letrero improvisado anuncia la venta de artesanías que en su mayoría son piedras sin tallar expuestas sin orden en mesas también de piedra del pequeño patio de su modesta vivienda. El silencio desilusionado cuando los turistas salen sin comprar nada, sin apreciar sus Rosas del Desierto, sus obsidianas o las sencillas sartas de cuentas que forman aretes y collares. No es un silencio en el que no haya ruido. Imposible con una frenética actividad industrial tan próxima, literalmente encima. Cuando sube uno al punto más alto del pueblo, hasta la reja que marca los límites de la propiedad de la omnipresente mina, recuerda lo que la infancia en un pueblo de montaña le enseñó: los sonidos tienden a subir. En el punto más alto se escuchan todos los sonidos de todo lo que se hace en el pueblo. Y en San Pedro impresiona lo poco que se escucha. Se escucha más bien que el pueblo calla, que la gente calla, y que los turistas en sus rápidas visitas, así se trate de grupos familiares con niños, se unen al silencio. Es un silencio evidente en que se escuchan todas las pocas conversaciones y que al mismo tiempo, se hace evidente el callarse tanto de dos hombres vestidos con pants que en una calle de arriba entre las dos iglesias dejan de hablar del frente amplio opositor a la mina en cuanto pasan los turistas, a ese silencio de mirada pesada de los hombres con chalecos fosforescentes y cascos de seguridad que instalan un sismógrafo a media calle. Es fácil, distinguir a quienes trabajan en la mina de New Gold: los transportes blancos, sean las impresionantes picks ups, o los colectivos, y los chalecos fosforescentes con el nombre de la empresa en la espalda. Callan con una mirada pesada que le dedican al turista los que pasan sobre sus vehículos, como los que, sentados frente a la oficina de la empresa, una llamativa casa blanca de una planta a 20 metros de la imponente barda que cierra la calle tras la iglesia conteniendo los excesos de la mina, de hecho evitando que los restos del cerro, la cáscara que han dejado las excavaciones, se venga encima, incluso fotografían discretamente a cada turista que pasa. Si no callan, al menos se nota que hablan con voz conmedida las dos jóvenes mujeres que con sus chalecos y pesados zapatos mineros suben la calle de entrada hasta el puesto –de pronto única actividad evidente- de elotes asados y hervidos que mantienen en una esquina de la pequeña plaza dos hombres más bien viejos. Los únicos que parecen hablar con libertad y desparpajadamente parecen ser los empleados del minúsculo edificio del ayuntamiento, con sus camisas azules perfectamente identificadas, que se ponen de acuerdo a media calle a 40 metros de la barda, en la misma calle bloqueada, sobre como distribuir los apoyos de su oficina. Dan la impresión de no tener miedo. En la calle de entrada un viejo de camisa azul se asolea y apenas saluda, del interior de la casa resulta perfectamente identificable una conversación banal de mujeres. De pronto se materializan dos señoras de ropas obscuras que subirán la calle eventualmente seguidas por las empleadas de la mina que vienen a pasar su descanso en la plaza comiendo elotes. Llama la atención que los turistas no preguntan nada. Leen los letreros fijos en llamativos postes de manufactura reciente, aunque en el que da la explicación amplia de la parroquia desapareció, ¿arrancado?, el panel metálico que sostenía el texto en español. Los turistas tratan de recorrer rápidamente la parte del pueblo de este lado del río seco buscando los laberintos y las sorpresas de los pueblos mineros de calles angostas, pero topan en todas partes con puertas cerradas y muy rápidamente con las rejas metálicas que atravesando las ruinas marcan los límites invasivos de la mina.

            Un silencio por demás imposible, o un silencio por aplastamiento, la mina en realidad está por todas partes alrededor: para llegar a San Pedro se cruza un puente sobre el moderno libramiento de la ciudad de San Luis para quienes viajan entre Querétaro y Monterrey, y luego se pasa bajo un amplio y moderno túnel bajo una carretera especial que comunica la zona de explotación, el cerro que se está desgajando y la impresionante, por enorme, zona de jales que se alza por encima de todo el paisaje circundante, coronando pueblos un poco más alejados como Portezuelo, aparentemente alejado de todo el movimiento de la mina, incluso del antiguo, del tiempo colonial o porfiriano, como sí es evidente en las viejas haciendas de beneficio de Monte Caldera y Cuesta de Campos. Luego del túnel uno ve la moderna y muy fortificada entrada a las instalaciones de la mina y un poco más allá un muy moderno pueblo que por todos lados grita ser propiedad de la mina a pesar de los letreros pintados a mano de venta de lotes. Inmediatamente después se entra en el típico cañón donde aparecen, como se veía hace pocos decenios al entrar a Guanajuato por Marfil, las ruinas de pequeñas edificaciones de barro y piedra que siguen el contorno del camino junto al río seco, y finalmente, cuando se detiene uno y baja del coche en la bella pequeña plaza arbolada de la parroquia, se va a ver dominado por un ruido incesante que viene de arriba, por un lado un permanente paso de camiones pesados, por otro lado un ruido de actividad constante que no puede determinarse, de algo que no cesa. Incluso, poco después de la instalación del sismógrafo se demuestra su utilidad, una gran explosión, se siente un pequeño temblor y luego se escucha el fuerte rumor de lo que sólo puede entenderse o imaginarse como un gran desplazamiento de tierra. Si uno permanece el suficiente tiempo en el pueblo, algunas horas, termina descubriendo que el silencio es más bien esa espontánea necesidad de medir el ruido propio ante el rumor incesante que baja de la mina.

            El silencio podría explicarse –uno se siente impelido a hacerlo, sobre todo que en realidad no se deja de escuchar el rumor industrial, y la gente finalmente, los turistas, los empleados del ayuntamiento y los vecinos están teniendo conversaciones, las normales, las necesarias- simplemente por el efecto que produce en el ánimo las iglesias cerradas, como el efecto que logró el Vaticano cuando para provocar a la población contra Plutarco Elías Calles para iniciar la rebelión cristera, ordenó cerrarlas. O también de manera esperable, por tantas casas abandonadas y en ruinas. Pero es claro, que no es el abandono del viejo pueblo minero colonial y porfiriano, sino el de instalaciones turísticas recientes como el del museo que aún ostenta su nombre. Se siente el abandono reciente, y poniendo atención, termina uno dándose cuenta que si por un lado los pobladores normales y los turistas bajan la voz y miden sus palabras, los que callan son los omnipresentes hombres de chaleco fosforescente y cascos de colores llamativos. Son los del silencio, aunque también, llama la atención, escuchando desde la parte alta la falta de los comunes sonidos animales que acostumbran acompañar a toda población, no se oyen ladridos de perros, ni el cuchicheo desordenado de gallinas, por ejemplo.

            Pero también impresiona, lo demasiado evidente, es ver al pueblo coronado por una triple línea de una especie de albarrada en la parte alta del cerro, rodeándolo, el ver el corte limpio de una mordida sobre lo que alguna vez fue la cima del cerro, y el ver circular los imponentes camiones de carga por sobre las dos iglesias en algo que ya sólo es pura tierra que tras la parroquia se ve contenida por lo que parece la cortina de una presa, todo el tiempo parece que todo ese enorme montón de tierra removida, está a punto de caer sobre el pueblo, o que aquello que está mordiendo el cerro y que sólo ha dejado la cáscara del cerro junto al pueblo, está a punto de desaparecerlo con una nueva mordida.

martes, 12 de junio de 2012

Una Vista de mi Interior.